lunes, 23 de agosto de 2010

(Embozado y repentino)


En el pozo sin fondo de mi memoria
coexisten mil sueños dormidos,
las verdades cotidianas que fueron 
mezcladas con señales olvidadas,
con nuevas realidades y anhelos,     
mas ni las viejas costumbres sueñan tan hondo
ni guardan vigilia los desvelos presentes:
                                                                                                                                       
"Son trescientas estancias pintadas
de fantasmas locos y ensoñaciones,
la sala común atestada de invitados
pero solamente un cuarto de baño
para atender tamañas necesidades;
y en esta algarabía o choza
de la que soy orgulloso propietario
me escabullo entre letras
acuciantes y recuerdos obligados,
para encender el candelabro capital
mientras los visitantes son desalojados.
                                                                 
Cuando el último paso resuena y la
última puerta muere de un portazo
te encuentro envuelta en un sofá de chocolate,
amarrada a un perfume insidioso,
y a pesar de que intento el desalojo a voces
las paredes no obedecen servidumbre,
y me veo avocado a pasar la noche
saboreando películas, cacao y besos,
a merced de un atisbo de mi pasado
que se cuela de rondón en mis aposentos."
                                                                         

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3 comentarios:

  1. A veces, hay recuerdos que se pegan a la piel, como chapapote que cuesta mucho de borrar...

    Con tu permiso, y viendo que hay un sofá de chocolate, me quedo a seguir leyendo tus poemas.
    No me parecen de un "mal poeta".

    Un beso desde mi Mar Eterno

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  2. Ya somos dos las que estamos dando cuenta de tu sofá de chocolate...

    A los sueños hay que espabilarlos de vez en cuando.
    Y cuando los sacudimos, nos devuelven esos anhelos desplegados en forma de mil mariposas revoloteando por las veredas de nuestros ojos.

    Besitos, y gracias por el chapoteo en la Orilla!

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  3. Con poemas y chocolate subsisto lo que me queda de vida. Yo creo que ni sofá me haría falta.
    Otro abrazo

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